Fue durante mi viaje a Argentina, hace algunos años ya, cuando descubrí las verdaderas empanadas argentinas, las típicas de carne, por supuesto, pero también las de mozzarella, cebolla y orégano, que son mucho más suaves y ligeras. Eso sí! Os recomiendo que si os animáis a prepararlas, utilicéis las auténticas «tapas» argentinas para cocinarlas, las tapas es la masa exterior de la empanada y si son auténticas argentinas las podréis encontrar para freír o para hornear. En Barcelona, hay una tiendecita cerca de Sagrada Familia y otra en plaza Letamendi (de los mismos dueños) dónde venden productos argentinos y dónde podréis comprarlas congeladas.
Ingredientes para 15 empanadas:
1 paquete de tapas (yo he utilizado la marca la salteña para freír)
3 cebollas medianas
1 paquete de mozzarella rallada (como la que utilizáis para pizzas)
Orégano seco
Aceite de oliva para pochar la cebolla.
Sal y aceite de girasol para freír las empanadas.
Necesitaréis: Sartén y freidora (yo no tengo freidora y he utilizado una olla anti adherente pequeña)
Dificultad: Fácil
Empezamos limpiando, pelando y cortando a medias lunas la cebolla.
La pocharemos en una sartén con bastante aceite a fuego lento durante una media hora. Cuando la tengamos lista, retiramos del fuego y reservamos.
Montamos las empanadas colocando la tapa redonda en una superficie limpia, y encima añadimos un poco de mozzarella rallada, un poco de cebolla y finalizamos con unas hojas de orégano seco y sal. Ojo con las cantidades sino os costará mucho cerrar la empanada. Para cerrarlas yo lo hago a mano, sino podéis intentar cerrarlas haciendo unas marcas con un tenedor.
Freímos en una freidora o en su defecto en una olla con aceite de girasol suficiente como para cubrir las empanadas.
Cuando estén doradas, retiramos del fuego y dejamos sobre papel absorbente hasta el momento de servir.
¡Espero que os gusten!